Incorporar maquillaje con protección UV en tu rutina diaria es una excelente manera de cuidar tu piel mientras luces fabulosa. Sin embargo, existen errores comunes que pueden reducir la eficacia de la protección solar y afectar tu look. A continuación, te explicamos cuáles son esos errores y cómo puedes evitarlos para aprovechar al máximo los beneficios del maquillaje con SPF.
1. Creer que el Maquillaje con SPF es Suficiente
Uno de los errores más comunes es pensar que el maquillaje con SPF proporciona toda la protección solar necesaria. Aunque muchos productos de maquillaje contienen SPF, la cantidad que se aplica generalmente no es suficiente para alcanzar la protección que indica el envase. Para obtener la cobertura adecuada, se debería aplicar una capa gruesa de base, lo cual no es práctico.
Cómo evitarlo: Es recomendable aplicar una capa de protector solar antes del maquillaje. Un protector solar facial con un SPF de al menos 30 debería usarse, y es esencial dejar que se absorba completamente antes de continuar con el maquillaje. De esta manera, se asegura una base sólida de protección, y el SPF en el maquillaje servirá como un refuerzo adicional.
Para obtener más información sobre cómo aplicar correctamente el protector solar, se puede consultar esta guía detallada de la American Academy of Dermatology.
2. No Reaplicar el Maquillaje con SPF
Olvidar reaplicar el maquillaje con SPF es otro error común. La protección solar no dura todo el día, y el SPF del maquillaje, al igual que cualquier protector solar, pierde efectividad con el tiempo, especialmente si se está expuesta al sol, se suda o se tiene piel grasa.
Cómo evitarlo: Para mantener la protección, se debe reaplicar el protector solar cada dos horas. Si preocuparse por arruinar el maquillaje es un problema, se pueden usar polvos translúcidos con SPF o sprays faciales con protección solar, que pueden aplicarse sobre el maquillaje sin alterar el acabado.
Si buscas recomendaciones de productos con SPF para cada tipo de piel, este artículo de Healthline ofrece una lista completa.
3. No Considerar el Tipo de Piel al Elegir Maquillaje con SPF
No todos los productos de maquillaje con SPF funcionan igual para todos los tipos de piel. Usar un producto inadecuado puede causar problemas como brotes de acné, sequedad o un acabado que no favorece.
Cómo evitarlo: Se debe elegir maquillaje con SPF formulado para el tipo de piel específico. Si se tiene piel grasa, es mejor buscar productos libres de aceites y no comedogénicos. Para piel seca, una base hidratante con SPF es ideal, ya que no reseca la piel. Además, si la piel es sensible, los productos con SPF mineral, que contienen óxido de zinc o dióxido de titanio, son una excelente opción, ya que son menos propensos a irritar la piel.
4. No Usar la Cantidad Adecuada de Producto
Aplicar una cantidad insuficiente de maquillaje con SPF es un error que disminuye la protección solar. Muchas personas aplican solo una pequeña cantidad de base o polvo, lo que significa que están recibiendo solo una fracción de la protección solar que el producto podría ofrecer.
Cómo evitarlo: Se debe usar una cantidad generosa de maquillaje con SPF y asegurarse de distribuirlo uniformemente en todo el rostro. No se deben olvidar áreas como el cuello y las orejas, ya que una cobertura uniforme es clave para una protección efectiva.
5. No Leer la Etiqueta del Producto
No todos los maquillajes con SPF ofrecen la misma protección. Algunos solo protegen contra los rayos UVB, que causan quemaduras solares, pero no contra los rayos UVA, que son responsables del envejecimiento prematuro y pueden penetrar más profundamente en la piel.
Cómo evitarlo: Es fundamental leer la etiqueta para asegurarse de que el producto ofrezca "protección de amplio espectro". Esto significa que protege contra los rayos UVA y UVB. Además, se debe verificar la fecha de caducidad, ya que el SPF puede degradarse con el tiempo.